sábado, noviembre 12, 2005

La pichanga



La pichanga

Hace unos días entré al chat y ví a mis amigos de Lima planear un partido de fulbito. No podía permitir tanta felicidad, y les envíe por e-mail, el siguiente texto que escribí solo por vengarme.

Y dice así:

Llegamos como a las nueve y media y los caseros no llegaban. Vásquez estaba listo con su chorcito sus zapatillas de 10 lucas recontraviejas, su polo verde incombustible y su gorra marrón - que todavía no tirábamos al meadero de los pobres. Zico tenía como siempre su buzo plomo cochinazo y su polo verde con huecos que usaba cada vez que jugábamos pelota o que tenía que pedir beca de alimentos. El Nero venía en jeans y polito metido, ya en la cancha se calateaba como los grandes a pesar que las viejitas de la Ciudad del Pescador ya le habían hecho roche llamando al Serenazgo un par de veces. La Kika, que rara vez venía a jugar con nosotros, llegaba con su polo de Jhon Lennon y sus tabas tigre con manchas de pintura. De vez en cuando algún incauto de los ciclos inferiores se nos acolleraba y teníamos formado un equipo digno de cualquier rival.

- Oe Brizo, ¿a que hora dijeron los caseros?
- No sé Vásquez, Zico debe saber.
- Esos bassssuras dijeron a las 9 y media. Ta´ que fallas oe.

Los caseros eran los patas de ciclos antiguos, los de la "antigua currícula". Estaban comandados por Willy - por eso yo les decía "los Willy´s"- que jugaba acertadamente de mediocampista, defensa, delantero y no se si algún día se puso al arco. Johan que era el defensa más machetero que he visto en mi vida, Javier "el parrilla" que jugaba adelantado y siempre cazaba la pelota antes de que entrara al arco, El gordo Carlos que tapaba (en todo el sentido de la palabra) el arco de los caseros, y algun otro más que no me acuerdo.
Cuando al fin llegaron y comenzaron con sus clásicas frases como "Zico ¿dónde están tus payasos?" para atarantarnos mientras la Kika trataba de hacer más de tres pataditas seguidas, enrumbamos a la canchita de siempre, maleteándonos unos a otros. Vásquez medía su barriga con Johan, Zico le pedía al Parrilla sus libros de Oracle pero él no atracaba: "No jodas pezuña, ya sabemos que eres cabeceador". Esa frase me hacía recordar que Zico "perdió" la pelota que con tanto sacrificio compramos en Las Malvinas a un choro. Willy iba hablando con el gordo Carlos pero el que más captaba la atención del gordo era Pedro uno de los jugadores eventuales que le preguntaba sobre como programar mejor en Informix, los rumores decían que Pedro consiguió su chamba sin saber ni un carajo de Informix y el gordo Carlos le enseñó de a pocos.
Comenzó el partido y la Kika se falló de arranque tres goles: un cabezazo que mandó al poste de luz, y dos tiros que le salieron más chuecos que los dientes de Brisa.

- Putamare Kika asegura pe´ huevón.- dijo Vásquez, su dupla en la delantera.
- Te voy a prestar mis videos de Romario.- dijo Zico.

Yo estaba en la mediacancha con Tito (camarón) que a pesar de su contextura de lucha libre se movía por las bandas mejor que yo que estaba más flaco que Felpudini. No teníamos defensa, nunca jugábamos con defensa todos subíamos y bajábamos, nuestra juventud lo permitía. Los caseros jugaban mejor armados, y casi no se movían de su posición, si una pelota caía más allá de la media cancha...era de Willy, pero si estaba en su área era de Johan.Mientras tratábamos de recuperarnos de las burradas de la Kika, Johan metió un despeje de los suyos y cayó cerca de Willy, se la dio al Parrilla y él fusiló al Nero. 1-0 a favor de los masters.

- ¿Qué pasó brizo?, no marcaste a Willy.- me recriminó Tito
- Estaba viendo al Parrilla, pero me ganó el vivo.- dije .

Pero todos sabíamos que era culpa del Nero que cuando ve un cañonazo se tira para el lado opuesto del que va la pelota.
Sacamos rápido para atrás, Willy y el parrilla salieron a marcar a Tito, él se la dio al Nero que me vio desmarcado y me lanzó la pelota con la mano "Tuya Brizo". La paré con el muslo de espaldas al arco del gordo Carlos, pero antes de que pudiera girar Johan me levantó de una patada y volé como cometa. "Foul, foul!!...Oe Johan no seas machetero huevón", dijo Vásquez pero Willy le dijo que no había pasado nada, que Johan fue a la pelota. El lateral era de nosotros y se lo di a la Kika, el se la tocó a Zico que probó de fuera al gordo Carlos, la pelota le chocó en la barriga y rebotó hasta la cancha de frontón. Otro lateral, ahora lo sacó Vásquez, se la dio a Tito, él a mí, yo a Zico, otra vez a mí, enganche y Johan a comprar pan, se la di a Vasquez que pateó...al palo.

-Ta´mare Vázquez, deja la paja huevón.- gritamos a coro.

Vásquez, cansado a los dos minutos se me acercó y me dijo que iba a hacer el amague de patear pero me la dejaría "No falles huevón que me quedo misio, y tengo que esperar al chofer que me conoce". Me reí y le dije que la haga bien que el gordo no era huevón. Sacaban los caseros, Pedro la abre a Johan, el avanza con paso lento y la mano adelante para que yo no me acerque - ni huevón me acercaba Johan, siempre me arañabas el pecho y mi hembrita nunca me creía que fue jugando fulbito - pase a Willy que sale de la marca de la Kika y de Vásquez, Zico le cae al toque y lo tapa bien, pase a la parrilla que fusila al nero otra vez pero ahora la pelota le cae en la pierna a nuestro Dolmo Flores. "Vamo´ Neroo´" grita Vásquez y corre solo por la derecha, los caseros están descolocados y el trajín de sus años les impide regresar rápido.Increíblemente Vásquez la para con el pecho tipo Zidane y gira en un solo movimiento, me quedé huevón viendo - hasta ahora no se como lo hiciste panzón - pero recordé su táctica y corrí para acompañar la jugada. El gordo Carlos sale a taparle el arco, Vásquez se le acerca y cuando lo tiene casi encima me la da, yo solo la empujo para adentro del arco. 1-1, renacen las esperanzas.

- ¡Bien brizo, bien !.
- Si fallabas te cachábamos huevón.
- De uchero cualquiera.

Willy no parecía muy contento. La Parrilla le dio la pelota y de arranque nos hizo mierda a la Kika y a mí, hizo pared otra vez con la parrilla y dejó atrás a Tito y Zico que le jaló la camiseta y lo paró. Willy volteó asadazo y vio a Vásquez , que había vuelto a la normalidad, y llegaba como siempre tarde a la jugada. "Juega bonito pe` huevón", le increpó y nuestro Zidane lo mandó a la mierda. Las aguas se calentaban.
Tito desborda por la derecha como siempre, ve a la Kika desmarcado y se la centra perfecta para empujarla, vemos enternecidos como la Kika trata de elevarse pero en su intento se convierte en un pedazo de plastilina caliente y no la alcanza ni con la mano. Lateral para los caseros. Johan me da una patada leve por detrás, sin bola, volteo y me río, le agarro la panza y digo "Habla staff, guárdame un machito". Ahora Tito no se despega de Willy, Pedro no sabe a quien dársela, la manda al arco y el gordo Carlos se la manda a la Parrilla (otra vez) que corre hasta la línea final y centra para atrás pero le choca en la mano a Zico. "Mano, mano!!" "No jodas oe, ha sido casual" "Putamare casero no seas llorón ha sido mano". Sacan ellos. Toque atrás, Willy abre a la derecha, llega Pedro y la manda más lejos que el carajo. Johan se asa y le grita, Willy lo mira y Pedro se paltea. Los caseros se empiezan a desesperar como siempre, ahora es el momento.
Llamo a la Kika a un lado y le digo que se meta por el lado de Alejo que está pasando desapercibido hasta ahora.
- Tás huevón, si me caga la barbilla como al cachaco.
- No pasa nada, desde ese día ya le entra más suave a la gente.-le dije y él, inocente, atracó.

Mi idea era simple: Alejo reventaría a la Kika, pero cuando la pelota quede rebotando yo cañoneaba al gordo Carlos y la apuesta era nuestra.El Nero se la da a Tito, él a mi, se la devuelvo y nos sacamos a Pedro de encima, viene Willy y Tito casi la pierde le da el pase a Zico a pesar de que la pelota rebota en el tobillo de Willy, el Parrilla se quedó arriba esperando que fallemos, Zico corre y se saca a Johan por velocidad, me ve solo en el centro y me la da, antes de recibirla ya se que se la daré a la Kika. Cuando él la recibe no tiene tiempo ni de respirar, Alejo lo saca con el cuerpo y los dos se caen...como esperaba la pelota queda suelta dando botes. Llego y la pateo con los ojos cerrados y el arco en la memoria, el gordo Carlos - como nunca - me tapa todo el ángulo pero no logra agarrar la bola que se le chorrea de las manos. Pero la pelota no va al arco, ya empezaba a lamentarme cuando de donde nadie sabe aparece Vásquez, nuestro Zidane, nuestro Romario (mitad ropero mitad armario) y la empuja dentro del arco antes de caerse solo y rodar hasta fuera de la cancha.
- Gol carajo gol.
- Buena, camarón.
- Se ve que la Jessica te ha inspirao.
- Ahora a cerrarnos bien.

No hizo falta, se acabó el tiempo y ganamos el primer partido de esa mañana. Los caseros pagaron la gaseosa. Como siempre regresé con ampollas, un cariñito de Johan en la pantorrila, mis dos lucas de apuesta intactas, y mis tabas rotazas.

- Oe brizo, le has quitado las tabas al loco de tu barrio.- me dijo Vásquez
- Cállate huevón que tu has venido a jugar con las medias de México 70.

No hay comentarios: