lunes, julio 14, 2008

Denise ¿Who?


Hablo por casualidad con el tío nuevo del almacén, y descubro que también es peruano. Como yo. Tiene una camiseta que pone “soy peruano ¿y qué?" en el pecho, con grandes letras blancas que, imagino son Verdana cuando podrían haber sido, mejor, Helvética. Recuerdo entonces la camiseta roja con letras blancas que mi hermano me trajo de su penúltimo viaje a Lima (afición cara e inútil, la de los viajecitos al terruño, que nunca podré comprender) el mensajito es “Te Amo Perú” y tiene, como no, su banderita infaltable a modo de acento en la “U” de Perú. Me la puse una vez para dormir, creo, y soñé con Toledo y Martha Chávez. Cuando me entra la peruanada, como mucho, veo "El Francotirador" por internet, o le pongo una escarapela al peluche que mis amigas de la universidad me regalaron cuando escapé de Lima. Algo que hago cada 28 de Julio, a modo de ritual ashaninka.

El paisano me habla de su barrio, en Los Olivos, y yo le pregunto si conoce a una tal Denise Arregui, que un día apareció, no sé como en mi perfil de Facebook. No me suena, flaco, responde, dándole una vuelta más a su oloroso cau-cau. Sí, le digo, tienes que conocerla, yo he buscado por Internet y parece que salía en Buenos Días, Perú, pero que le llegó al pincho eso de contar tragedias y se largó del canal. Él, busca en su memoria, me imagino que entre imágenes de Gisela Valcárcel, películas malas de Pancho Lombardi y alguna canción de los Nosequién o de Tongo. No caigo, dice, y me hace gracia lo de "no caigo", porque hace mucho que no lo escuchaba. Me dice que me olvide de la tal Denise, que fijo que no me conoce, ni querrá, ¿pa' qué perder el tiempo, cuñao? dice que él conoció el sábado a una peruana en los bajos de Orense, que facilita nomás, fue con él a su casa. Congratulations, digo, pero por su mirada sé que no me ha entendido; entonces cambio lo dicho por Provecho, brother, y ya se siente más suelto. Se explaya contra mi voluntad, y dice que a esa chata ya le había echado el ojo unas semanas antes, que habían cambiado teléfonos pero nada más. Contrataco, piensa brother, Denise, tenía un programa en Canal N, creo que es un canal de cable, el programa era de arte, teatro y no sé qué más. El sigue engullendo su cau-cau, aprovechando que ahora hablo yo, pero sin dejar de masticar me dice que en su barrio no había cable, ni robado, y cuando iba a la casa de su cuñado veían el fútbol nomás. Y entonces la chata llegó a mi casa, y después de tres cubatas ya estábamos ahí, matatiru en el sofá, y con la ventana abierta, cuenta, orgullosísimo de su gran conquista y sin darse cuenta de que a mí, su historia, me importa una mierda. O menos.

Dejo que mi silencio le haga entender, pero él, como buen conversador sabe que si no me dice algo que me interese me perderá para siempre. Denise, Denise, ¿no es una flaca de pelo negro, simpaticona? Sí, sí, digo, huevón al cubo porque su descripción corresponde al 70% de las peruanas, podría ser Cati Caballero, Melania Urbina, Ximena Lindo, Maricielo Effio o la tamalera de mi barrio. Sí, si, esa, Creo que hasta tenía un grupo de rock y cantaba en Barranco, me imagino que de ahí la conoceré. Pero nunca la he visto en la tele, porque calculo que apareció cuando yo me fui del país. Mi conversador compañero remata con un gran seguro, seguro, esa debe ser, pero no la ubico. Y yo, que me siento engañado ignoro el resto de su relato erótico-festivo-afrolatinocaribeño.

Al volver a mi sitio abro mi perfil de Facebook, y veo otra vez su cara sonriente, pero no puedo ver el detalle de sus fotos. Seguramente nunca nos hemos visto, pero me mata la curiosidad y le mando un mensaje, una solicitud de amistad para ver sus fotos, un mensajito en la botella que sé que no responderá “hola, ¿nos conocemos? Hagamos amigos, amigos, amigos, cada día más amigos” le doy al botón de enviar, pero sé que no contestará y me quedará la duda eterna. Al menos, no será como Mirella, a la que encontré en hi5. Ella sí que resultó ser amiga mía, pero cuando conoció a Sol y supo que era mi novia, no quiso salir conmigo nunca más. ¿Why, Mirella, why?

Minutos después, cuando ya había olvidado casi el tema, mi paisano apareció por sorpresa y me dijo que el viernes tenía una pollada, que si me apuntaba. Muy agradecido, le dije, pero creo ya he quedado con unos amigos. Para la próxima. Se va y retomo el poco trabajo que tengo en verano. Se me ocurre que quizá me quiera comprar mi camiseta roja, y llevarla orgulloso el próximo 28, a lo Chorri Palacios.

1 comentario:

eldast dijo...

ella trabajó en la serie Misterio y ahora sale en jammin (plus tv)